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19 julio 2007

Recorrido por el sabor de Colombia

Sentir los tres colores de Colombia en el corazón es el mejor estado del alma, no importa la distancia que separe a los hijos de esta amada patria.

Sentir el amarillo es tener las energías para hacer mejor las cosas cada día y lograr las metas lejanas en una tierra desconocida.

Sentir el azul es llevar siempre los paisajes nacionales, la costa, los llanos, la sabana, el Amazonas y todo el territorio en la mente.

Sentir el rojo es sacrificarse por una causa, es cohibirse de algunos momentos con sus compatriotas por buscar un mejor vivir.

Tomar una decisión de vida y partir en busca de un destino mejor refuerza el amor por Colombia, por una patria que sufre cada día, pero que nunca pierde la esperanza de lograr la tan anhelada paz.

Lo nuevo de mi patria hoy, para los que están lejos, es que ahora no hay ningún impedimento para recorrerla desde cualquier ciudad. Solo basta con fijarse un destino y listo.

En Bogotá, el Transmilenio cambió la vida de los capitalinos, porque por solo con $1.300 se puede andar desde la calle 170 hasta El Tunal, desde el Portal de la 80 (un nuevo centro comercial al noroccidente) hasta Chapinero.

Es un sistema de transporte que le dio una nueva cara a la ciudad y que (hay que decirlo) en medio de apretujones, los buses articulados, como gusanos rojos movilizan a los bogotanos, con todo y sus sueños, para que cumplan las citas de su destino. Esta es solo una muestra del progreso que ha tenido mi Bogotá amada.

Para todos los que están lejos, les envío estos pequeños regalos, hoy, en el día en que el patriotismo se siente más arraigado en el corazón…

Cartagena, el corralito de piedra…

La Ermita de Cali…

Un niño de la Sabana de Bogotá...

El Divino Niño del 20 de julio...

Catedral de sal de Zipaquirá...


Estatua humana de la Cra. 7ª en Bogotá...

Atardecer en Santa Marta...

Parque Jame Duque en Sopó...

Viva Colombia y que nunca la olviden, sin importar lo lejos que estén. No se les puede pasar por alto el saborear un delicioso CHOCORRAMO, una PONY MALTA, un CAFÉ COLOMBIANO, un MANGO BICHE, una BANDEJA PAISA y mil delicias de la culinaria nacional.

Y que decir Carlos Vives, de Shakira, de Aterciopelados, del BINOMIO DE ORO, de Diomedez Díaz, de Darío Gómez y hasta de las Hermanitas Calle.

No puedo dejar a un lado a los grades personajes que le ponen sabor a la vida de un colombiano: la vendedora de rosas, la mujer que prepara el algodón de azúcar, la estatua humana de la carrera séptima, los malabaristas de los semáforos y miles de héroes anónimos que hacen de Colombia una UNICA patria para vivir.

Son innumerables los valores que hacen de COLOMBIA una patria inolvidable. Pero más que eso, los mejor de ser colombiano es que no importa lo lejos que se encuentre el paisa, el costeño o el rolo, siempre se van sentir orgullos de ser colombianos.

¡¡¡ FELIZ DÍA DE LA INDEPENDENCIA!!!

Saludos desde Colombia, un hermoso rincón de América Latina.