Este es un escenario que mezcla la belleza natural de Cundinamarca con la mano de los habitantes de la región. A menos de dos horas de Bogotá, el lugar se convierte en plan obligado para turistas.
Por sólo $4.000 se llega a este bello paisaje en los carros de balineras impulsados por un pequeño motor. Allí puede disfrutar del panorama mientras prepara un plato típico a la orilla del río junto con una bebida helada.
Un buen programa para un fin de semana o un día festivo.